ESPECIAL - UP IN THE AIR - CRITICA

Dirección: Jason Reitman

Guion: Jason Reitman y Sheldon Turner

País: EE.UU         

Género: Comedia dramática

Año: 2009

Basada en la novela homónima de Walter Kim.

Ryan Bringhman es el empleado estelar en una compañía que contrata otras para despedir a sus empleados. Por ello pasa sus días viajando en avión, llegando a considerar los aeropuertos casi su hogar; no ve casi a su familia y menos cree en las relaciones de pareja estables. Pero llega una joven compañera de trabajo proponiendo un nuevo modo para disminuir recurso humano, complicando el proceder de Ryan pues no requiere surcar los cielos. El jefe de ambos decide que viajen juntos para demostrar, pese a los gastos, que la empresa debe continuar con los viajes.

El cine nos acostumbro mayormente que un ser solitario debe sentirse maginado y amainado casi al punto de la enajenación. Expuesto a una confrontación como expiación de sus cargas, teniendo como alusión piezas de Darren Aronofsky. Sin embargo este drama sincero con situaciones graciosas, nos da un enfoque honesto al protagonista que de forma autoimpuesta y paulatinamente evasora prefiere ser distante. Nos lo muestra de forma amoral, con la libertad de sentir real empatía hacia él a pesar de tener ejercer tal empleo, sirviendo como explicación o vehículo de sus motivaciones de acuerdo a su mesurada pero compleja personalidad.

En el transcurso del relato, él logra evolucionar cuestionándose su ideología vital e incentivar la búsqueda individual, los catalizadores son personajes singulares y buen definidos, empezando por su interés pasional, una mujer que ha sabido separar los distintos aspectos de sí misma, algo que él tiene pero con argumentos endebles; también esta digamos su “pupila laboral”, que actúa como antítesis con un candor inimaginable. Diría que no vemos personajes, sino personas que a su manera intentan encajar en este universo nada forzado, siendo naturales al crear analogías sobre su condición. Hay compasión espontanea, no generada dentro de la toma.

Su narración es balanceada, carente de puntos muertos y las escenas que generan emociones resultan específicas en un lenguaje sobrio, coherente y depurado, jamás hay innovación pero el conjunto está bien armado. Las interpretaciones son magnificas, con un contenido George Clooney que nos hace olvidar que es George Clooney, Vera Farmiga es correcta pudiendo sacar más de ella y una más que fantástica Anna Kendrick.

En conclusión, la trillada frase “de tal palo, tal astilla” no aplica para nada en esta obra, pues Jason Reitman desde su opera prima ´Gracias por fumar’, demostró ser más que apto al lograr superar su padre, realizador de comedias edulcoradas e insulsas cuyo logro relevante fue dejarnos una pieza decente de la cultura popular, ´Los cazafantasmas’. 

Por OSCAR CABRERA